domingo, 6 de febrero de 2011

Ruidos que mojan los ojos.

Fantástica y vette.

Del verbo amar se desprende uno más

Que solo nosotros sabemos.

Nos gustaría hablar de el pero las

Leyes se intimidan, se conjugan sangre y gente

Para aterrarse ante tal acto.

Ellos dejan para el asunto y la situación toda la diversión.

Ellos ven 300 y no los ven.

Ellos solo en las tardes besan lo que el tiempo les regala.

Lo que son los labios y las bocas.

Lagrimear al sentir el alma traspasada por un sonido a risa, sonrisa, sonido interdimensional. Destruye el espíritu y lo rehace en nada.

Descubrirnos raros, melosos y sorprendidos por lo que obviamente no conocemos. Es raro. No lo sabía.

Un innumerable de vibraciones y de pensamientos unidos por la cara del cuaderno.

Hay que persistir, subsistir, existir. Uno al lado del otro. Fantásticamente casi imposible. Solo casi.

TAI

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