Pienso en usted dama del verde vestido.

Meterse dos líneas de coca a las 8 de la mañana se puede traducir como productividad. Más si lo haces a escondidas dentro de tu cuarto que esta tan solo a unos centímetros de los que te lo alquilan. Luego te fumas un porro para que amarre. Mojas su punta para que no salga o propague el olor a yerba quemada. Después te pones a escribir como chucho persiguiendo un auto en plena 5 de febrero. Solo tienes que tener cierta habilidad mental para captar esas asombrosas imágenes que se te aparecen detrás de la nuca. Y tomarlas y engullirlas, pasarlas por el filtro y convertirlas en letritas ordenadas. Además tienes que mantener el volumen un tanto bajo para que los vecinos no se despeinen con el ruidoso heavy que has puesto. Por o demás todo esta como que pintado. Parece un cuadro sino surrealista si hiperreal.
Y las ideas fluyen como búfalos perseguidos por indios en las llanuras de Idaho.
Se te aparecen profundas escenas de situaciones pasadas recargadas de correcciones.
Deseas de nuevo aquello que tanto deseas. La quieres besar y arrancarle los labios a besos. Meterte por sus ojos como si fueras una aguja afilada. Divagar dentro de su organismo como si de un virus se tratara. Amar la situación. Desarmar ideas banales, corrosivas e inútiles.
Conseguir mediante letras que el teléfono nunca sea colgado. Etc.
Y ahora bajar a desayunar con el ánimo hasta el techo. Recibir consejos que se te hacen cortos. No crees en ellos. Te formas tu mismo los caminos a seguir. Hasta la muerte con tus ideales. Con tu idea. Nada se acaba solo se transforma en un nuevo principio. Tu nariz gotea agua. Y tus ojos rojos están. Puede ser que alguien se de cuenta pero antes de que eso suceda te vas al trabajo a seguir el día y sus coleadas.
Le dices a la gente con tu mirada que no se preocupen. Que te dejen solo es lo que quieres.
Que todos se pueden ir a lugar atascado de lejanía. Tu No Necesitas A Nadie. Y lo que es mejor: Nadie Te Necesita.
Pero dicen que no es cierto: hay gente que te necesita. Y te niega. Tambien hay gente que necesitas: y los niegas.
Vaya juegos del cerebro mudo.
Deshacerte enmedio de una fiesta. Irte con el primer ente humano que pase. Que te ahogue adentro de sus mentiras. Que sientas amarlo y saber que el no. Que ella no. Que ellos no. Que nadie te amara. Ni a nadie le importarás dentro de 5 segundos.
Un carro pasa raudo a tu lado. Te saca de tus pensamientos. Ves el numero 62 en el camión y te subes.
Dices adiós a todo lo que dejaste en esa parada.
El sol brilla encabronadamente y lo odias.